Barcelona, 19 de octubre de 2017. El inesperado corte de tráfico del tramo Francesc Macià – Cinc d’Oros de la Diagonal para quitar la cera de la calzada ha provocado unas importantes afectaciones al tráfico y al transporte público de la ciudad. Los efectos se han dejado notar en muchos puntos de la ciudad, más allá del ámbito inmediato de la Diagonal, donde no se había podido circular longitudinalmente durante todo el día ni se había podido cruzar durante las primeras horas. Prácticamente todas las líneas de bus tuvieron afectaciones importantes. La PTP quiere aprovechar este singular corte de circulación para recordar 6 ideas clave sobre el tráfico, que ayer NO se pudieron poner en práctica:
1) Ayer se tuvo que improvisar la movilidad sobre un corte inesperado, sin que se pudiera preparar ningún contingente de tráfico (ni regulación semafórica ni señalización de itinerarios alternativos) ni de transporte público (adaptación de la red a la nueva situación). A diferencia de los cortes convencionales de calle para manifestaciones o ferias, donde se impide la circulación longitudinal a los vehículos, los cruces de la Diagonal también resultaron bloqueados. Así pues, la experiencia vivida ayer es del todo incomparable con otras operaciones de movilidad que incluyen una reducción de carriles con éxito, como la puesta en marcha del Trambaix, los nuevos carriles bus de la Nova Xarxa Bus o la reforma de la plaza Glòries, donde se modificaron cientos de grupos semafóricos planificadamente.
2) La reducción del tráfico es una necesidad en Barcelona, pero necesita planificación y un tiempo de transición. Cualquier cambio viario provoca afectaciones que van desapareciendo a medida que el tráfico se adapta a las nuevas condiciones de oferta de la red viaria. De ninguna forma el corte inesperado de la Diagonal puede considerarse aviso o ejemplo de lo que pasaría con las obras de la conexión de los tranvías Besòs – Baix Llobregat.
3) Para no ser traumática, la reducción de tráfico debe combinar medidas de tarifación de la movilidad privada (aparcamiento, peaje), potenciación del transporte público (capacidad, rapidez, intermodalidad) y de la movilidad no motorizada y reconversión del espacio viario y de aparcamiento a nuevos usos (carril bus, tranvía, carril bici, acera …).
4) En la Diagonal no se prevé ningún corte total del tráfico, sino pasar de 3 a 2 carriles de circulación por sentido y mejorar los cruces. La pérdida de un carril por sentido no es traumática y permite incrementar notablemente la capacidad y prestaciones del transporte público. En la siguiente infografía se hace una aproximación que demuestra que el transporte público genera más movilidad con menos tráfico. Además, las obras de la conexión de los tranvías Besòs – Baix Llobregat se podrían ejecutar sin cortar íntegramente la avenida.
5) El tranvía de la Diagonal permitirá desestresar a los semáforos de la Diagonal, porque con menos tiempo de verde puede podrán pasar más viajeros en condiciones de rapidez. En este video se hace una aproximación que demuestra que el transporte público genera más movilidad con menos tráfico.
6) El tranvía en la Diagonal permitirá duplicar la capacidad del transporte público, ayudando a reducir el tráfico urbano y también el interurbano procedente de 8 municipios. Hay que recordar que casi el 70% del tráfico que se desplaza por Barcelona procede de ciudades dotadas de metro o tranvía. Además de ganar en accesibilidad, la tranviarización del transporte público de la Diagonal permitirá ganar en rapidez: los tranvías actuales circulan a una media de 17-18 km/h frente a los 11 km/h del bus.
